Hay momentos en la vida en los que te gustaría dar las gracias por lo que tienes.
Este es uno de ellos.
Quería darte las gracias por estar siempre ahí, en los bueno y en lo malo.
Por hacer que una sonrisa equivalga a otra.
Por partir céntimos, por buscar pelusas, por decir pouffe, por buscar tarta gratis, por leer un cuento de hace años en el columpio de un parque...
Un solo lamento, el de haber tardado tanto. Pero definitivamente, ha merecido la pena.
No te vayas nunca! ;)
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